Budoka y la Efectividad
Cayetano A. Sánchez (Ko-Oni) Vayamos por partes, me gustaría dejar claros algunos puntos. Me gusta el Koryu Bugei, las artes marciales tradicionales, aunque no reniego ni tengo nada en contra de las modernas, de la visión competitiva que de ellas se tiene hoy dia. También entiendo que se haya convertido en un pasatiempo, en una forma de ocio y, en otros casos una vía mística de autorealización. Considero que, en el siglo XXI, ninguna de estos puntos de vista son contradictorios y todos pueden convivir perfectamente, incluso complementarse. Mi objetivo no es únicamente lanzar una mírada crítica y, en ocasiones, un tanto ácida sobre el Budo, sino decir y divulgar lo que hay de verdad, desmontando algunos mitos que distorsionan la realidad del Budo. Conocer la tradición no debe significar ser tradicionalista y mucho menos ser un talibán de esa tradición, incluso más que los propios japoneses, lo que en mi opinión ha de hacerse es trasladar esos conceptos a nuestra sociedad y tomar la parte buena que tiene para adaptarla a nuestros tiempos. En este contexto y con estas miras, me gustaría aclarar que ser o considerarse Budoka, no implica nada, no convierte a nadie en superior, ni inferior a nadie. El sufijo -Ka, viene a ser lo mismo que nuestro sufijo -ista, que significa «aficionado a» o «practicante de», por tanto, ser Budoka (Judoka, Karateka, Kendoka) es lo mismo que ser Futbolista, Ciclista, o cualquier otra cosa por el estilo. Y lo mismo que existen aficionados al ciclismo que nunca compiten ni buscan otra cosa más que disfrutar de un paseo en bicicleta y ponerse en forma, hay Budoka que únicamente pretenden aprender o practicar determinadas técnicas. Desde este punto de vista, el debate sobre la efectividad es totalmente estéril y vano. No tiene importancia si lo es o no lo es. Ahora bien: ¿Lo son? Por supuesto que sí. La primera consideración es la razón por la que se practica cualquier Budo, lo que se espera de esa práctica y el método que se sigue para conseguirlo. Y aquí la primera de mis críticas tanto hacia los profesores como hacia los practicantes. Permítaseme insistir en cada quien busca lo que quiere en el Budo, lo que es a todas luces una incongruencia es pretender una cosa y practicar en otra dirección. Establezcamos un símil: el Boxeo. Un boxeador, aunque sea un simple aficionado que nunca entrará en un ring, entrena «de verdad», ya sea al saco, al punching o con sparring, los golpes y situaciones, aunque sean de entrenamiento y, por tanto podríamos decir que en un sentido «falsas», van al objetivo que tienen que...
Reflexiones sobre el método de artes marciales XI
Kenji Tokitsu CN-9ºDan Comunicar sin mostrar En las ciudades importantes del Japón de la época Edo (1603-1867) existían numerosos dojos de kenjutsu (el arte del sable). A finales de esa época, se censaron más de setecientas escuelas de kenjutsu en Japón. Una escuela también podía tener sucursales, dando lugar a un número considerable de dojos. Cuando un dojo daba a un camino o una calle, tenía las ventanas en lo alto de la pared para que los transeúntes no pudieran ver lo que pasaba en el interior. Así, los entrenamientos se hacían al abrigo de las miradas. En aquella época, ver un entrenamiento equivalía a asistir a clase. Había que contar con permiso para ver, pero en ese caso, sólo se podía hacer después de haberse incorporado a la escuela. En la historia de las artes marciales, podemos encontrar varios ejemplos similares; en jûjutsu, en taichi-chuan y otras corrientes de boxeo chino, en el kárate de Okinawa… La situación era muy diferente de las costumbres de nuestra época, en la que frecuentemente oímos: « No quiero asistir a clase, sólo quiero mirar. » Porque mirar parece no tener importancia, y según muchos, debería ser gratuito. Sin embargo, hay que saber que una vez que pidas observar una clase, estás pidiendo hacerte alumno. Dicho esto, está claro que puede haber entrenamientos y clases sin importancia en las que no hay nada que esconder… Pero lo esencial de las artes marciales no puede transmitirse únicamente por mensajes visibles; existen también unas sutilezas en los aspectos técnicos y energéticos que requieren una comunicación particular. Son mensajes no verbales y poco visibles. Las técnicas de las artes marciales implican conocimientos particulares que hayan sido ensayados y mejorados por experiencias, para luego ser elaborados y transmitidos en el curso del tiempo. Si una técnica es eficaz, o mucho más eficaz que por la simple activación ordinaria o acostumbrada del cuerpo humano, significa forzosamente que hay en juego un saber particular. Implicaría más que un conjunto de acciones aplicadas y ejecutadas a partir de la lógica ordinaria. Necesariamente debe haber un conocimiento sutil elaborado. Un maestro del jûjutsu a quien ya he citado dijo: « Si realmente quieres progresar, debes reflexionar continuamente. Pero, que sepas que no está garantizado que vas a encontrar las sutilezas esenciales del arte, aunque seas muy inteligente. Si sólo posees una inteligencia ordinaria, no tienes ninguna posibilidad. No es para los que sólo saben confundir la eficacia con la brutalidad… » Si una técnica se formase sólo por gestos corporales, bastaría con copiar bien estos gestos para aprenderlos. Pero una técnica debe implicar también la manera de sentir el cuerpo y su...
Ippon Kumite 2 – Karate-do
Fernando Martín Millana CN-7ºDan Técnicas de Ippon kumite hasta nivel de cinto naranja. Ejecutado por Fernando Martín, 7º Dan de Karate-do. . Más videos en www.sapeando.com, el mayor portal de videoaprendizaje de alta calidad. Volver a la sección...
Renzoku Waza -2
Fernando Martín Millana CN-8ºDan Renzoku waza hasta nivel de cinto naranja, puntos importantes. Ejecutado por Fernando Martín, 8º Dan de Karate-do. . Más videos en www.sapeando.com, el mayor portal de videoaprendizaje de alta calidad. Volver a la sección...
La Ryu
A pesar de que a este término le damos el significado de “escuela” verdaderamente su traducción no es la exacta. El significado de escuela vine dado quizás por añadidura. El ideograma de Ryu simboliza algo que corre, tiene mas sentido de continuidad. Este ideograma conforma con otros términos describe en el lenguaje japonés la corriente de un río que fluye por su cauce. Lo mismo hace el conocimiento de una Ryu fluir por el tiempo pasando su esencia de hombre a hombre. Hoy deberíamos concebir a la Ryu como un método de preservar el arte marcial a través de sus enseñanzas transformando a los neófitos en grandes maestros, en ese gran taller de forja que es el Dojo. La Ryu ha transmitido su conocimiento del Arte durante muchas generaciones. La impronta de cada Ryu es fácil de percibir, cualquier posición, técnica, manera de saludar, atar el sageo o hasta desenfundar y enfundar una katana hace diferenciar una de otra. No es necesario un distintivo al pecho para saber a que Ryu pertenece un practicante, solo hay que esperar a que realice un gesto marcial. Pero una Ryu no define solo un estilo, una Ryu va mas allá de agrupar una forma de arte marcial, preserva a través de sus métodos el contenido pedagogico de un sistema que le hara perdurable. Un Arte Marcial no se convierte en una Ryu hasta que no pasa a una segunda generación de practicantes. Una Ryu en principio la fundaba alguien que la transmitía a sus descendientes, era como una empresa familiar donde también tenían cabida a ajenos a la familia, pero siempre a la cabeza un hijo o un descendiente directo del fundador, no siendo así en todos los casos pues no habiendo descendiente directo recogía el testigo el alumno mas aventajado. El Fundador de una Ryu alcanzaba gran renombre dentro en el mundo marcial por lo que representaba la escuela. El principal objetivo de la Ryu era transmitir los métodos del Maestro fundador a sus descendientes y ellos a su vez a los integrantes de la misma pero no solo como enseñanza sino como vía integradora de cambio en el individuo a través de sus principios morales. Tanto el cuerpo como el espíritu del iniciado eran moldeados hasta convertirlos en unos auténticos discípulos. Hoy en día el practicante de arte marcial que dice pertenecer a una Ryu se guía bajo la ética que acentúa el valor del individuo no aceptando algo mucho más amplio en su desarrollo, los valores, que es lo que preconiza la Ryu. Por eso la gente de hoy rechaza la Ryu pues requiere una correcta actitud del que...
Comentarios recientes