Os presento un pequeño trabajo, llamado Kokoro no maki en japonés, que se incluía a menudo en los manuales de budo. Kokoro significa «corazón», «centro», «núcleo», «alma», «espíritu».
Cuando el corazón está lleno de cosas, el cuerpo se siente constreñido; cuando está vacío, el cuerpo se siente expandido.
Cuando hay demasiada cautela en el corazón, el amor y el respeto se pierden; cuando el corazón está libre de reservas, el amor y el respeto aumentan.
Cuando el corazón está lleno de pasiones innobles, se olvidan los principios; cuando está lleno de pasiones innobles, se olvidan los principios; cuando está libre de estas pasiones, los principios se recuerdan.
Cuando el corazón se centra en cosas fatuas, las apariencias se falsean; cuando está libre de artificio, las apariencias son reales.
Cuando el corazón está lleno de orgullo, surge la envidia por los demás; cuando está libre de orgullo, los demás son respetados.
Cuando el corazón está lleno de uno mismo, se duda de los demás; cuando el corazón es desinteresado, se confía en los demás.
Cuando el corazón está lleno de errores, los demás parecen una amenaza; cuando está libre de error, no hay nada que temer.
Cuando el corazón está lleno de obstáculos, se hace daño a los demás; cuando el corazón está libre de obstáculos, nadie es dañado.
Cuando el corazón está lleno de codicia, se adula a los demás; cuando está libre de codicia, no hay necesidad de adular.
Cuando el corazón está lleno de ira, se dicen palabras duras; cuando está libre de ira, se dicen palabras de paz.
Cuando el corazón está lleno de paciencia, todo se pude poner en orden; cuando no es paciente, todo se desmorona.
Cuando el corazón está lleno de engreimiento, se ignora la bondad de los demás; cuando está libre de engreimiento, se aprecia la bondad de los demás.
Cuando el corazón está lleno de avaricia, las necesidades son interminables; cuando está libre de avaricia, no se necesita nada extra.
Cuando el corazón está lleno de fantasías, se culpa a los demás; cuando está libre de fantasías, no se menosprecia a nadie.
Cuando el corazón está lleno de sinceridad, es fácil sentirse contento; cuando no es sincero, no hay alegría.
7 enero, 2018
Lo cierto es que “Ai” tiene un significado muy concreto, como concepto. Y, entonces, “KiAi”, lleva un sentiro, y por tanto una dirección, que revela, una vez más, la profunda raiz de Budo sobre la que se sostiene el Karate.
Pero, fíjese Maestro, que bonito ese “Rei” con el que se “abre” una intención (Ki) en el Karate japonés.
Fíjese, aunque seguro que ya lo sabe, como al inclinarse esos 45 grados, sin perder la miraea del somen, los globs oculares quedan colocados de manera que activan la glándula pineal. Esa que rige el sistema endicrino y activa las ondas Theta.
Que preciso Ueshiba al definir Rei como El Espíritu,
Que enormes debieron ser esas sesiones de trabajo y estudio que compartieron Mabuni, Ueshiba, Funakoshi, Cano… y otros más que supieron entenfer que “La Belleza”, esa de la que hablaba Platón, no es un cuento chino sino la evolución de un ADN.
Quizás por eso se diga Arte Marcial; pues aquello que se entiende como Arte lleva intrísico el objetivo de ser constructivo, creativo.
Un abrazo sea, Maestro.
Y siempre Gracias.
Álvaro Ponte.
10 enero, 2018
Hola Álvaro:
Me alegra un montón volver a leerte y espero que pronto podamos encontrarnos de nuevo. Parece que «siempre somos los mismos». Un placer aprender de ti lo verdaderamente importante de las artes marciales.
Recibe un abrazo muy fuerte,
Adolfo.
11 enero, 2018
Hola, Adolfo!
Te escribí en tu blog hace unos meses. Sabía de tí por Javier.
Ha sido una sorpresa ver que escrbías aquí. Que bien.
El Lunes voy escapeme a Talavera. Mira, (me acaba de mandar un wsp sobre cuestiones de hemisferios y ”lateralidad”… Siempre estoy enredando. Ya sabes, El Universo es Movimiento.
Cambié de mail defensaymeditacion@hotmail.com, pero sigo sin prestar mucha stnción a las tecnologías.
Ando olisqueando sobre Epigenética y estímulos inducidos…Aunque ya habló de ello Aristóteles.
Súper abrazo!
Álvaro.